El curso pretende brindar a los estudiantes un conjunto de herramientas conceptuales que los introduzcan en la comprensión y análisis de la Gestión en el ámbito de la Defensa. En particular se propone analizar al Estado tanto como estructura institucional y organizacional, como conjunto de relaciones entre actores que participan en la definición de las políticas públicas del sector Defensa.

Consideramos necesario abordar ambas dimensiones (aparato público y política pública)  partiendo de una perspectiva estructural que incluya, por un lado la contextualización histórica de las decisiones tomadas en materia de administración de las burocracias en el ámbito de la Defensa, y por otro lado, el análisis de las relaciones establecida entre las Fuerzas Armadas y otros actores de la vida política (parlamentarios, organizaciones de la sociedad civil, actores internacionales, etc.) para la problematización de la política pública de Defensa Nacional.

Desde el punto de vista del aparato público, se puede entender desde una definición acotada que la burocracia pública son las estructuras y mecanismos necesarios para el incremento de la eficacia, la eficiencia y la efectividad del aparato público estatal. Sin embargo, también es posible ampliar la mirada, y definirla como uno de los aspectos nucleares para la creación de nuevas condiciones que posibiliten una relación más democrática entre el Estado y la sociedad. Un planteo como este nos lleva a entender a la burocracia pública no sólo como un ámbito gerencial o técnico sino como un espacio que se encuentra atravesado por múltiples lógicas e intereses que condicionan los productos que se generan durante el propio proceso de gestión. Reconociendo el valor analítico e instrumental de las tecnologías de gestión propias del ámbito estatal, en el curso focalizamos en algunas herramientas para el abordaje de las estructuras ministeriales, el planeamiento y el presupuesto en defensa.

Por otra parte, a pesar de que no hay duda de que la política de defensa puede ser analizada como una política pública, son escasos los trabajos y propuestas que desde la ciencia política y, más específicamente, las teorías de las políticas públicas hayan abordado ésta temática. Los estudios de la defensa nacional han estado dominados por la disciplina de las relaciones internacionales, principalmente a través de los estudios de geopolítica asociadas al pensamiento realista de ese campo de estudio.[1] Asimismo, durante los ochenta, las aperturas democráticas, por un lado, y la desactivación de los conflictos regionales, por otro, promovieron la renovación de las perspectivas analíticas sobre la defensa, y dieron lugar a la emergencia de nuevos enfoques provenientes de las ciencias sociales.[2]

Una primera perspectiva que tuvo fuerte impulso durante esos años y la segunda mitad de los noventa fue el de las relaciones civiles – militares.[3] En segundo lugar, a partir del fin de la Guerra Fría y de la disminución de los conflictos interestatales en la región, surgieron en los noventa un conjunto de estudios en Latinoamérica y Argentina –bajo el influjo de los Estados Unidos– que buscaron redefinir el papel de las Fuerzas Armadas.[4]  El impacto de estos últimos debates es doble. En el plano doctrinario, si se sostiene que no hay fronteras entre defensa y seguridad interior, tiene poco sentido prohibir la intervención de las Fuerzas Armadas en temas de seguridad interior. A nivel internacional, este concepto se asocia al Principio de No Indiferencia por el cual la comunidad internacional –con el fin de “garantizar” la seguridad humana en determinados países– podría llegar a intervenir militarmente en los mismos, violando el tradicional principio de no intervención.

Por todo lo expuesto, se aborda la política de defensa a partir del herramental teórico de la ciencia política, en especial el de políticas públicas, utilizando eclécticamente algunos conceptos de las teorías de las relaciones internacionales. Para ello pensaremos la política pública de defensa como un proceso visible en todas las políticas públicas. En cuanto a los contenidos mínimos:

Toma de decisiones y gasto público.

Indagar en experiencias concretas de formación y desarrollo de la política de defensa en Argentina y América Latina.

Estudiar las decisiones adoptadas en materia de política de defensa nacional en el Nivel Estratégico Nacional, analizando los factores que han influido en el proceso decisorio.

Estudiar la gestión de la política pública de defensa a partir del concepto de S3P, materializado en el caso argentino en el Ciclo de Planeamiento de la Defensa Nacional, aprobado a través del Decreto Nº 1729/2007.

Estudiar la materialización de la gestión de la defensa nacional a partir de cada uno de los componentes del MIRILADO, en contraste con las decisiones adoptadas en el Nivel Estratégico Nacional.



[1] En efecto, la geopolítica cobró relevancia en nuestro país a mediados de los años cuarenta, su difusión y proliferación  estuvo estrechamente ligada a los institutos superiores de las Fuerzas Armadas. Durante los años ’50 y ’60, la geopolítica continuó siendo un enfoque predominante en América Latina, con un peso sustancial en la subregión suramericana. En efecto, en países como Argentina, Brasil y Chile, las premisas geopolíticas se constituyeron no sólo como herramientas analíticas para el estudio de los problemas estratégicos, sino también como factores determinantes de la política exterior. En los años setenta se perfiló una vertiente que, partiendo del reconocimiento de la situación de dependencia de los países de la región, señaló la importancia de trabajar por una geopolítica de la integración. No obstante, el advenimiento del golpe de estado en marzo de 1976 dio por tierra con los enfoques integracionistas, que fueron reemplazados por estudios que insistieron en la necesidad que Argentina continuara adscribiendo a los valores de Occidente y a la Doctrina de la Seguridad Nacional.

[2] Ver Russell, Roberto (1992) “Introducción”, en Russell, Roberto (comp.) Enfoques teóricos y metodológicos para el estudio de la política exterior. Buenos Aires: GEL y Colacrai de Trevisán, Miriam (1992) “Perspectivas teóricas en la bibliografía de la política exterior argentina”, en Russell, Roberto (comp.) Enfoques teóricos y metodológicos para el estudio de la política exterior. Buenos Aires: GEL.

[3] Estos trabajos buscaron responder a la pregunta de cuál era el rol de las instituciones militares latinoamericanas en las flamantes democracias. Es decir, estos trabajos pretendieron analizar la “cuestión militar” atendiendo a la imperiosa necesidad de controlar civilmente a las Fuerzas Armadas.

[4] Ante la pregunta sobre qué hacer con estas instituciones se desarrollaron dos líneas de trabajo interrelacionadas que tenían como consecuencia reinsertar a los militares en tareas de seguridad interior: a) Una serie de trabajos comenzó a estudiar las llamadas “nuevas amenazas”: fenómenos que eran meramente policiales habían adquirido relevancia estratégica por interés e impulso principalmente de los Estados Unidos. Estos trabajos sostenían que para hacer frente a esas amenazas, debido a su magnitud, era necesario involucrar a las Fuerzas Armadas en el combate de las mismas;  b) Paralelamente, otro conjunto de publicaciones buscó desdibujar la frontera analítica entre seguridad interior y defensa, porque sostenían que la naturaleza de las amenazas y la creciente interdependencia hacían fácticamente imposible distinguir entre amenazas de origen interno o externo. En esta corriente podemos ubicar un desarrollo teórico que sostiene que el foco de la seguridad debía pasar del Estado a las personas y que el objetivo es garantizar la “seguridad humana” de las mismas.